12 de noviembre de 2023

Traidores a la cárcel

Dice ese refranero popular del que podemos aprender tantas lecciones, que "quien con niños se acuesta, mojado se levanta". La equivalencia de dicho refrán con todo lo que está sucediendo en estos días es clamorosa y personificada de manera magistral en Pedro Sánchez. No sabemos exactamente qué es lo que pasa cada día por la cabeza de tan nefasto personaje, pero buscar semejantes compañeros de viaje para iniciar una legislatura que nacerá ya condenada, puede terminar por deslizarnos peligrosamente por una vía similar a la del 36 solo a cambio de unos miserables escaños.

En lo que respecta al votante socialista, poco que añadir, convertidos en una masa de tontacos dispuestos a dar el visto bueno a una cosa y exactamente a la contraria. Si Pedro o "Lo País" dicen blanco, pues blanco; si dicen negro pues negro. Todo un abanico de posibilidades que lo mismo les lleva al funeral de un compañero asesinado por ETA a buscar como apoyo a quienes nunca lo condenaron. Apoyo que, por supuesto, nunca sale gratis.

Baste mencionar como anécdota de este monumental despropósito que hasta todas las asociaciones de jueces se han puesto de acuerdo para enmendarle la plana al pacto. Para que "Jueces y Juezas para la Democracia" que son una de las asociaciones más sectarias de España, firme en contra de algo que emana de las filas socialistas, lo han tenido que ver tan mal que incluso "acojona".

Así que como miles de españoles de varias ciudades, los miembros de la asociación TAS RAÍCES hemos salido a la calle a decir basta a todo este cúmulo de traiciones, desvaríos y tropelías cometidos por Pedro Sánchez. Obviamente, nos gustaría ver que muchísimos más españoles se unen a dichas movilizaciones. No obstante, es muy positivo ver sumarse a cada vez más gente joven, con banderas españolas sin el escudo y numerosas banderas con la Cruz de San Andrés, algo que nos indica que el sentimiento de orgullo hacia nuestro pasado más glorioso y hacia nuestra esencia, no está perdido del todo.

Y es que una vez más, hemos de insistir en la idea, recogida en el manifiesto que hemos firmado todas las asociaciones que formamos parte de la Red Desperta, de que ni se trata solamente de frenar esta deriva del gobierno Sánchez y su descomunal bajada de pantalones, ni tampoco siquiera de un simple cambio de gobierno.

El tiempo nos está dando la razón a quienes llevamos años manifestando que aquí el principal responsable es un régimen, el constitucionalista del 78, verdadero monumento a la pusilanimidad, que es el que nos está llevando al abismo, por activa o por pasiva, manifestando una terrible dejadez frente a la hoja de ruta que han elaborado quienes planean partir España en mil pedazos.

Decía nuestro apreciado Javier Barraycoa en un artículo reciente, que "no dejaba de asustar cómo un texto redactado en pocos meses y discutido en poco tiempo por unas Cortes, podía llegar a determinar el futuro de una sociedad" Pero lo cierto es que lo lleva haciendo desde entonces y cuyos principales beneficiarios son los partidos independentistas a los que el régimen ya les concedió un sistema electoral que les otorgó, una representatividad parlamentaria muy superior a lo que era su verdadera dimensión popular.

En aquellos debates de entonces, nos recuerda también Barraycoa, un militar, Marcial Gamboa Sánchez-Barcáiztegui, avisaba de que la inclusión del término nacionalidades era un error, ya que su manifiesta ambigüedad lo convertía en algo interpretable como diferentes naciones. Otros como Blas Piñar, advertían en la cámara sobre lo que se nos venía encima pero no se le quiso escuchar y se le tildó de "ultra". Todo ello, no perdamos nunca de vista, en un contexto donde organizaciones terroristas de extrema izquierda y separatistas, llenaban España de muertos, mientras la prensa canalla del régimen criminalizaba cualquier idea que tildasen de "centralista".

No resulta, por ello, nada esperanzador, ver hacia dónde camina nuestra maltrecha nación si tenemos además en cuenta, toda la serie de concesiones que este mismo régimen otorgó a un independentismo vasco, que recogía las nueces mientras ETA ponía sobre la mesa el secuestro, la extorsión, la exclusión social y el asesinato de centenares de españoles, viendo simultánea y macabramente, el rendimiento que sacaban a base de sangre inocente. En "La derrota del vencedor" del profesor y periodista aragonés Rogelio Alonso, menciona acertadamente la utilidad que ETA tuvo para el nacionalismo vasco, ideología que consolidó su hegemonía política, cultural y social.

Va siendo ya hora de una vez que el pueblo español abra definitivamente los ojos a la realidad. Sobran por lo tanto, esos llamamientos a un patriotismo "constitucional" que no es sino un oxímoron, desde el momento en que dicha Constitución y el régimen del 78 llevan otorgando al separatismo toda clase de competencias, privilegios y subvenciones.

Va siendo hora igualmente, que el pueblo español abra definitivamente los ojos ante el Rey y lo que representa, un auténtico adorno que ni está ni se le espera, entre otras cosas, porque juró acatar esta puñetera Constitución que es exactamente la ley que lo convierte en un auténtico pelele en manos del político de turno. ¿Va a dejarse de discursos huecos y salir a la palestra de una vez o tiene miedo de que su mujer lo mande a dormir directamente al sofá? Porque te recordamos, "majestad" que hasta el rey Balduino de Bélgica renunció unos días con tal de no firmar la ley del aborto en su país. A eso, Felipe VI, se le llama tener principios.

De igual manera, es hora también de abrir los ojos y entender lo que supone en realidad una Unión Europea que no tiene intención alguna de llamar al orden a Sánchez. ¿A quién se le pudo pasar por la cabeza manifestarse contra la amnistía enarbolando banderas de la UE, cuando es precisamente esa UE la que lleva años protegiendo y escondiendo a Puigdemont en la mismísima Bélgica?

Dejo para el final, no por casualidad, al mismo partido socialista que es la mano ejecutora de esta traición. Si hay algo más patético que sufrir la forma en que mal gobiernan, es tenerlos que ver asomados en los medios, vertiendo sandeces y justificaciones creyéndose que todos tenemos el coeficiente intelectual de sus votantes a quienes engatusan con la misma facilidad que a un tonto con unas maracas.

Andan estos días indignados, echándonos en cara el acoso a sus sedes y militancia. Lo cierto es que si hay un partido inhabilitado de por vida para dar lecciones a los demás es el PSOE, partido cuyo fundador, un matón llamado Pablo Iglesias, llegó a decir en sesión parlamentaria de 7 de julio de 1910 que antes de permitir el regreso a la presidencia de Antonio Maura, estaba dispuesto a "llegar hasta el atentado personal".

Posteriormente y de la nada, pero apoyado económicamente por la socialdemocracia alemana, llegaría el felipismo, que nos dejó, entre otras maldades, la llegada de la temporalización al mercado laboral, el comienzo de la privatización de empresas públicas en sectores esenciales, la liquidación de una gran parte de nuestra industria, el fin del derecho a la vida legalizando el aborto, la inclusión de España en organismos que volatilizaron nuestra soberanía, la irrupción de las primeras leyes educativas encaminadas a bajar el nivel y decenas de casos de corrupción.

Como aún podía darse una nueva vuelta de tuerca para hacerlo mucho peor, alguien decidió aprovechar el asesinato de casi 200 personas para colocar en el poder a Zapatero. ¿No recuerda la militancia socialista cómo? Nosotros le refrescamos la memoria: rodeando como auténticos matones las sedes del PP, y pasándose por el forro toda una jornada de reflexión, dirigidos por un Rubalcaba, que suponemos tendrá ya registrada la correspondiente Agrupación Socialista del Infierno y azuzados por el grupo Prisa que inventaba bulos como la existencia de terroristas suicidas que solo existieron en su imaginación.

Son tantas las fechorías cometidas por el PSOE que terminaríamos pegándole fuego al ordenador, machacando el teclado de manera inmisericorde. Lo dicho: allá cada Page, Lambán y compañía con su conciencia. Nosotros a lo nuestro, teniendo siempre presente las palabras de uno de los mayores héroes que ha dado la historia de España, Don Blas de Lezo y Olavarrieta, vasco y español como pocos, cuando decía aquello de que "una nación no se pierde porque unos la ataquen, sino porque quienes la aman no la defienden".


José Luis Morales